Los centros outlet han pasado de ser espacios periféricos de liquidación a convertirse en verdaderos destinos comerciales, turísticos y de ocio. Europa y España están viviendo una nueva etapa de crecimiento y consolidación de este formato, impulsado por el atractivo de precios competitivos, la incorporación de marcas premium y la mejora constante en la experiencia del cliente.
España, mercado estratégico
Según InfoRetail, España cuenta actualmente con 21 centros outlet que suman unos 494.000 metros cuadrados de superficie comercial. Esto representa sólo un 2,8% del total de superficie de retail organizada del país, pero su peso económico es notable. Uno de los operadores más destacados, Neinver (líder en España y Polonia), registró en sus centros españoles unas ventas de 682 millones de euros, en 2023, un crecimiento del 11% respecto al año anterior.
Además, la ocupación está en su punto álgido: algunos centros, como los gestionados por Neinver, operan al 100% de capacidad. Y lejos de estancarse, se están reformando y ampliando.
Ejemplos como Las Rozas The Style Outlets (Madrid), recientemente renovado con zonas verdes, coworking y nuevos accesos, o el plan de ampliación de Viladecans The Style Outlets (Barcelona), con la incorporación de unas 25 nuevas tiendas, confirman esta apuesta por una experiencia de compra mejorada.
Las marcas también responden. Firmas como Bimba y Lola, Munich, Rituals, Under Armour o Primor han reforzado su presencia en este canal, apostando por nuevas aperturas o ampliaciones dentro de los principales centros del país.
A éstas se suman otras enseñas, entre las que destacan Adolfo Domínguez, Mango, Levi’s, New Balance o Nike, entre otras, que han encontrado en los outlets un canal de venta rentable y complementario a sus redes tradicionales.
Europa, un mercado en expansión
Un informe de Ecostra y Ken Gunn Consulting sitúa en 23.000 millones de euros las ventas anuales de los 210 centros outlet europeos, con previsiones de alcanzar los 30.000 millones en 2028. Desde 2014, la superficie bruta alquilable (GLA) de estos centros ha crecido un 41% y sigue expandiéndose con nuevos proyectos y ampliaciones.
Según Savills, la inversión en outlets europeos alcanzó los 653 millones de euros en el primer semestre de 2025, superando ya los 1.000 millones en el acumulado del año. Esto representa el 3,2% del total de inversión retail, muy por encima de la media de la última década (1,8%).
La demanda de marcas también crece. Desde julio de 2023 se han abierto 588 nuevas tiendas outlet en Europa. Rituals lidera esta expansión con 14 aperturas, seguida por Jack & Jones, Under Armour y Swarovski. Las marcas planean abrir una media de 2,7 tiendas outlet este año, frente a las 2,4 de 2024, según Ecostra.
Los países con mayor potencial para nuevos outlets, según las propias marcas, son Alemania (35% de interés), España (32%), Francia y Reino Unido (27% cada uno). Esta confianza se traduce en proyectos como Alpes The Style Outlets (Neinver), que abrirá en 2027 en la frontera franco-suiza con un diseño altamente sostenible y 95 tiendas.
Diferenciación por experiencia
La clave del auge outlet está en su capacidad para diferenciarse del retail tradicional y del e-commerce. Y esto lo consigue a través de una propuesta que combina tres elementos clave: precios atractivos, presencia de marcas premium y una experiencia de visita cada vez más cuidada.
Muchos centros han dejado de ser meros espacios de compra para convertirse en destinos en los que también se disfruta. La oferta gastronómica ha ganado peso con propuestas más innovadoras y alineadas con las nuevas sensibilidades: desde conceptos locales y saludables hasta experiencias gourmet o formatos veganos. Y es que la restauración sigue siendo uno de los principales motores de crecimiento de los centros outlets.
A ello se suma una clara apuesta por la sostenibilidad, visible tanto en el diseño arquitectónico como en los materiales, el consumo energético o la introducción de servicios ligados a la economía circular, como espacios de reciclaje o reventa.
También la parte experiencial se refuerza con pop-ups, colaboraciones con marcas locales, eventos culturales o actividades de ocio.
Todo ello contribuye a un reposicionamiento del formato que transforma la percepción del consumidor: ya no asocia el outlet únicamente a liquidación, sino también a descubrimiento y valor de marca.
